Uno de los mayores desafíos de las empresas logísticas es enfrentar los peligros del inhibidor de GPS.
Considerando la amenaza que los jammers significan para la actividad logística de las empresas, es importante entender sus características, cómo funcionan, por qué se debe evitar su utilización y cómo protegerse de ellos.
¡Sigue leyendo y descúbrelo!
¿Qué es un inhibidor de GPS?
Un inhibidor de GPS es un dispositivo que utiliza frecuencias de radio para emitir una señal que bloquea o interfiere con las transmisiones del Sistema de Posición Global (GPS), afectando todos los procesos asociados al mismo, como el seguimiento de rutas de la última milla.
Aunque pueden variar mucho en forma, tamaño y dimensiones, la mayoría de ellos son fáciles de instalar. Es tan simple como conectarlo al puerto del cargador del vehículo y asegurarse de que el dispositivo esté cerca del rastreador GPS para comenzar a funcionar.
De hecho, los inhibidores y falsificadores de GPS tardan menos de 30 segundos en encenderse. Incluso se pueden desconectar y volver a enchufar según sea necesario, con el fin de no levantar sospechas.
¿Cuál es su fin?
Se cree que los inhibidores de GPS fueron desarrollados inicialmente por el gobierno de los Estados Unidos con fines militares, específicamente para engañar al enemigo sobre ubicaciones geográficas y objetivos.
Tiempo después, y luego de su éxito, los dispositivos se adaptaron para su uso por la población civil. Hoy en día, por haberse convertido en un equipo asequible y no muy difícil de encontrar, suele caer en manos de personas que no hacen un buen uso de su tecnología.
Características principales de un jammer
En su forma más simple, los jammers se caracterizan por emitir señales de radio de gran potencia, pero de menor alcance, a la misma frecuencia que el dispositivo con GPS, haciendo imposible que se determine su posición a través de la triangulación.
Generalmente, se compone por los siguientes elementos:
- Oscilador: genera la señal de radio que interferirá con la señal del dispositivo con GPS.
- Circuito de sintonización: controla la frecuencia a la que el inhibidor transmite su señal, enviando un voltaje particular al oscilador.
- Generador de ruido: produce una salida electrónica aleatoria en un rango de frecuencia específico para bloquear la señal del dispositivo con GPS.
- Etapa de ganancia: aumenta la potencia de la salida de radiofrecuencia a niveles lo suficientemente altos como para bloquear una señal.
- Una o varias antenas: para transmitir la señal generada.
¿Cómo funcionan los jammers?
Fácilmente encontrados para venta en el mercado clandestino, los jammers son ofrecidos como protectores de privacidad, en la mayoría de los casos, sin ningún tipo de regulación.
Aunque puedan parecer un equipo inofensivo y hasta confiable, la verdad es que este tipo de aparatos representa una grave amenaza para la seguridad del patrimonio y para la integridad de las personas.
En países como Estados Unidos su venta es ilegal, ya que las consecuencias del bloqueo de la señal de GPS y de las aplicaciones que utilizan el recurso de geolocalización pueden ser extremamente negativas e incluso mortales.
Dependiendo del grado de amenaza, Estados Unidos imputa severas penalidades para quienes lo utilizan.
3 razones por las que debes tener cuidado de un inhibidor de GPS
Pero, al final, ¿por qué el inhibidor de GPS es tan peligroso? A continuación, presentaremos tres razones por las cuales debemos huir de estos aparatos:
1. Afecta el funcionamiento de variados sistemas
En primer lugar, recordemos que el sistema de GPS se basa en datos muy exactos enviados desde 31 satélites en órbita, integrados por relojes atómicos.
La presencia de estos relojes en los satélites permite que ellos envíen señales precisas no solamente para fines de localización como también para la realización de transacciones financieras y de otras actividades cotidianas.
Los inhibidores de GPS actúan encriptando las señales de estos satélites. Como resultado, la acción de los inhibidores puede comprometer el funcionamiento de aviones, móviles y la Bolsa.
2. Pago de multas costosas
Como la utilización de los inhibidores de señal de GPS está prohibida para civiles, pudiendo ser usados únicamente por el ejército y cuerpos de seguridad, el costo por comprarlos e incorporarlos en la flota suele generar penalidades.
Es importante destacar que a partir del sábado 25 de enero de 2020 entró en vigor la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR) y del Código Penal Federal, la cual busca frenar los delitos cometidos mediante el uso de comunicaciones inalámbricas.
La llamada “ley anti-jammer”, derivada de una reforma a los artículos 190 bis de la LFTR y 168 del Código Penal señala que «las autoridades podrán sancionar con penas de 12 a 15 años de prisión a los particulares que fabriquen, comercialicen, distribuyan, instalen, compren, porten, utilicen u operen equipos que entorpezcan o anulen las señales de comunicación en audio, video y datos, dificultando así el auxilio o rastreo de personas y/o vehículos cuando se comete un delito».
3. Dificulta la comunicación de inconvenientes a la central
Ahora debemos centrar nuestra atención en la seguridad del operador y la carga. Cuando se utiliza inhibidores de señal para evadir trayectos que tengan control policial, por ejemplo, se está comprometiendo toda la comunicación entre el vehículo, la central y las fuerzas policiales.
Puedes considerar como bueno el hecho de no enfrentar paradas de control, pero estás exponiendo al operador y la carga a la acción de los delincuentes. Fíjate que, si necesitas entrar en contacto con la central por cualquier emergencia, la señal no estará disponible.
Otro aspecto preocupante es que la empresa no podrá controlar la localización del vehículo en tiempo real. En caso de que ocurra un rapto o desvío del vehículo en cualquier ruta, como las que van de punto a punto, su posicionamiento no podrá ser actualizado.
¿Cómo protegerse de este tipo de dispositivos?
A pesar de que algunas prácticas pueden resultar efectivas para protegerse de un inhibidor de GPS, como la educación/conciencia de riesgos y la formación adecuada de los operadores, la solución más rápida y efectiva en la actualidad es la instalación de equipos GPS Anti-jammer.
Este tipo de equipos son altamente eficientes no solo por la capacidad de detectar la presencia de un jammer, sino por activar —en consecuencia— alguna de las funciones que puedan evitar el robo del vehículo, como la inmovilización del motor o el encendido de las luces.
En consecuencia, al protegerse de los inhibidores de GPS se cuida la integridad tanto de los operadores como de la flota vehicular, y se mantiene en funcionamiento el sistema de automatización y control sin mayores interrupciones.
¡Utiliza la tecnología para cuidar tus operaciones de autotransporte!
Como puedes ver, usar un inhibidor de GPS ocasiona muchas desventajas. Es fundamental que la central pueda controlar la posición del vehículo mediante la señal de geolocalización, por eso, el uso de esos equipos que interfieren el envío de informaciones se hace tan perjudicial para las empresas de transporte.
¡Esperamos que este contenido te haya servido! Si todavía deseas profundizar más tus conocimientos sobre los jammers, puedes acceder a este artículo.
En caso de que ya tengas toda la información que necesites, te invitamos a conocer nuestra solución anti-jamming o a entrar en contacto con nosotros. Será un placer asesorarte.