La planificación de las rutas está cada vez más presente en las estrategias logísticas de las empresas modernas, dada su relación con la eficiencia y la competitividad organizacional. ¿Por qué es tan importante llevar a cabo un diseño de rutas eficiente? Básicamente, el desarrollo de un plan eficiente posibilita:
- Monitorear cada uno de los elementos de la operación logística, como operadores, cargas y vehículos.
- Reducir el consumo de combustible de la flota.
- Cumplir los plazos acordados con los clientes.
- Mejorar la productividad del equipo de trabajo.
- Optimizar la satisfacción de los clientes.
Como ves, el diseño de rutas es un recurso estratégico organizacional que, de realizarse correctamente, puede ser una gran ventaja competitiva. En las próximas líneas, presentamos 7 consejos efectivos para optimizar la dinámica de planificación y, de esta manera, desarrollar un proceso logístico más acertado y rentable.
1. Utiliza un sistema de planificación
Desarrollar un plan de rutas utilizando mapas o archivos físicos puede no ser una buena idea, ya que el diseño suele requerir mucho tiempo. En este sentido, recuerda lo siguiente: el tiempo es oro. Afortunadamente, existen distintos tipos de software de gestión capaces de diseñar rutas en segundos que, de este modo, economizan el tiempo requerido para estructurar este tipo de plan. Una herramienta que posibilite definir rutas proporciona ventajas como:
- Reducción de los costos operacionales.
- Agilización de la operación logística.
- Entregas más eficientes: incluso, al disminuir el tiempo requerido para efectuarlas, aumentan los ingresos.
- Optimización de la productividad de los equipos.
Asimismo, los sistemas para empresas logísticas son extremadamente prolijos, pues reducen el margen de error inherente a la planificación de rutas y, así, minimizan la probabilidad de incluir vías que puedan ralentizar o dificultar las entregas.
2. Prueba diferentes rutas hacia un mismo destino
A menudo, encontrarás más de una ruta para llegar al destino; por esta razón, te recomendamos probarlas para definir la más efectiva y económica para tu empresa. Para establecer la mejor opción, ten en cuenta:
- Camino más rápido.
- Existencia de peajes.
- Desvíos.
- Tráfico.
- Trayectos que demandan un menor consumo de combustible.
Al pensar en estos aspectos, tendrás información suficiente para ahorrar tiempo y gastos relacionados con el combustible y al mantenimiento de los vehículos.
3. Usa el tipo de vehículo adecuado
Un buen diseño de rutas también incluye la adopción de un vehículo capaz de cubrir todos los destinos considerados durante la planificación. El desarrollo de un plan exitoso está estrechamente relacionado con la gestión de flotas, la cual debes estructurar incorporando vehículos que puedan cumplir varias entregas en una única jornada. De esta manera:
- Evitan regresar varias veces al centro de distribución.
- Disminuyen las distancias que se deben emprender hasta que las cargas lleguen al destino.
- Reducen el plazo total de cada entrega.
En definitiva, elegir unidades acordes con el tipo de servicio de entrega igualmente contribuye a la definición de un diseño de rutas más eficiente.
4. Verifica las restricciones de los clientes
Es posible que un cliente no pueda recibir entregas durante un determinado periodo de la jornada o que requiera condiciones especiales de entrega. Por ejemplo, imagina que tienes 3 clientes —A, B y C— en la misma zona: mientras que los clientes A y B pueden recibir las cargas en cualquier horario, la empresa C puede recibirla solo durante el periodo matutino. Al tener presente lo anterior, es más coherente definir una ruta que cumpla las 3 entregas a lo largo de la mañana. Dicho en pocas palabras, si quieres mejorar el diseño de rutas, necesitas poner atención en la disponibilidad del cliente y verificar cuál es el mejor horario para efectuar las entregas.
5. Identifica la presencia de peajes
Además de promover una entrega eficiente y segura, el diseño de rutas también debe garantizar que el despacho no demande costos muy elevados, lo cual significa que debes considerar los peajes existentes a lo largo del recorrido. Normalmente, la ruta más corta tiene muchos puestos de peaje y, en virtud de ello, termina siendo el trayecto más caro. Para evitar la pérdida de la rentabilidad y de la competitividad del precio final, lo ideal es conocer los costos involucrados en cada situación y, así, establecer una ruta eficiente tanto en términos de distancia como de gastos.
6. Cuenta con planes alternativos
Es prácticamente imposible predecir todos los imprevistos que pueden desarrollarse durante el cumplimiento de un plan de ruta: se puede coincidir con accidentes, obras y otras situaciones imprevisibles que dificulten el flujo de los vehículos y, sobre todo, retrasen las entregas y comprometan la planificación de rutas. Por este motivo, vale la pena diseñar planes alternativos que puedan seguirse en caso de que ocurra una situación análoga a las señaladas anteriormente. Otro punto relevante es conocer vías que posibiliten salir de la ruta original planificada y desarrollar el plan secundario tan pronto se detecten inconvenientes.
7. Monitorea las rutas
La planificación de rutas es muy importante, pero no es suficiente para asegurar la efectividad de las entregas. Más allá de establecer los trayectos que deben cumplirse, es indispensable monitorear si, en definitiva, los operadores llevan a cabo el diseño establecido por el gestor de flotas. Bajo este contexto, es recomendable contar con un sistema de rastreo satelital que permita ver —en tiempo real— la localización de cada vehículo para identificar, de este modo, si el conductor respeta el plan de rutas y cumple con las entregas en tiempo y forma. Un programa de geolocalización posibilita detectar cualquier desvío de ruta y, por consiguiente, es útil para la seguridad del transporte de mercancías. Como puedes comprobar, realizar un diseño de rutas no solo permite alcanzar un mejor rendimiento operacional, sino también posibilita optimizar los ingresos. De esta manera, planificar y organizar rutas eficientes hace posible: aumentar la eficiencia de las operaciones, neutralizar errores, elevar el retorno de inversión y optimizar la atención al cliente. Como resultado, es posible mejorar el nivel de competitividad de la empresa y aumentar sus oportunidades de negocio. ¡Sigue nuestros consejos para el diseño de rutas en tu organización! ¿Qué te ha parecido nuestro post? ¿Te resultó útil esta información? Entonces, ¡aprovecha la oportunidad y suscríbete a nuestro newsletter para acceder a contenidos tan relevantes como el que has leído en esta ocasión!